Las escarxofes son una de las hortalizas más apreciadas de la cocina mediterránea. Hay toda una variedad de platos a base de alcachofa, platos que tradicionalmente se preparaban durante el invierno.
Las alcachofas se pueden comer crudas o cocidas según el gusto y la zona. Pueden ser el plato central o se pueden servir como acompañamiento. A la brasa o al horno son las maneras más sencillas de preparar esta hortaliza, puesto que conservan todo el gusto. Igualmente, son muy buenas, simplemente hervidas o al vapor con un chorrito de aceite de oliva, al alioli o salsa vinagreta según los gustos.
Esta excursión no solamente tenía el objeto de degustar una típica CARXOFADA, también tenía como objeto visitar la casa museo MAS MIRÓ.
Una casa blanca bajo un cielo azul intenso, el gallinero en segundo plano, herramientas del campo, vegetación y vida en todas partes. Así es como Joan Miró retrata al óleo Mas Miró, el lugar donde tomó la decisión de dedicarse plenamente a la pintura de por vida.
Aunque el pintor nació en Barcelona y murió en Palma, pasó largas temporadas en la casa familiar, situada en las afueras de Mont-roig del Camp. Es aquí donde se dejó cautivar por la vida rural y consolidó su vínculo con la tierra catalana, que marcaría para siempre el carácter del artista y, de rebote, su obra pictórica.
Mas Miró comprende el conjunto de edificios satélite de la masía de estilo colonial, erigidos en diferentes momentos entre el siglo XVIII y el XX. Catalogado como Bien Cultural de Interés Nacional, permite adentrarse en el taller del artista, descubrir sus esbozos y material, recorrer el jardín que conserva el gallinero, la capilla, los cultivos y el corral.