La cerámica ha sido históricamente la actividad más emblemática de la Bisbal d'Empordà, una manufactura de gran tradición que en el curso de los años ha generado un importante patrimonio material. Tanto es así, que el Terracotta Museo conserva un fondo de más de 10.000 piezas diferentes entre objetos cerámicos, herramientas y utensilios de fabricación. Ubicado en una antigua fábrica, la integración en la exposición de algunos elementos del proceso productivo (hornos, chimeneas...) convierte el propio edificio en uno de los objetos más destacados del museo.
El 29 de diciembre de 2015 reabre el museo después de los trabajos de la segunda rehabilitación del edificio, una transformación importante que marcará el futuro de la institución. Una transformación completa, tanto por como por fuera. Se han rehabilitado espacios no utilizados hasta ahora, se han derribado otros, se ha ampliado el espacio con nuevas construcciones y se ha redactado un nuevo proyecto museográfico. Con este equipamiento cultural, la Bisbal se consolida como referente de la cerámica en Catalunya.
Para terminar nada mejor que una buena "cargolada".
